El monasterio de San Justo y San Pastor de Urmella se funda en el siglo X por parte de los condes de Ribagorza. Su construcción se data desde 1017 hasta 1044, cuando finaliza la obra atribuida a maestros lombardos.
En principio se concibió como templo de planta basilical con tres naves diferenciadas en sendos ábsides y cubierto al modo lombardo con bóvedas con aristas en los laterales. En la reforma de 1613 se invirtió y compartimentó el templo, se demolió el ábside central para construir el actual pórtico y torre sobre la misma.